..Ella y su despiste. Chocó con alguien ( como no )... Cuando levantó la mirada para disculparse,encontró unos ojos negros como carbón.
Impactada,divisó entre su camisa un Triskel. Curiosamente,él mismo que llevaba ella.
Empezaron a reír.
Días después,las horas les pasaban como segundos...hablaban y hablaban,de todo,la vida,sus vidas,sus gustos....
Decidieron pues,acercarse al "local". Cada uno por separado. Como en un juego. Noche Buena. Una buena noche...
Ella,vestida de látex,máscara,botas y su inseparable látigo. Si. Era Mistrees.
Él,traje oscuro. Porte elegante,mirada altiva. Dominante.
...sus miradas volvieron a cruzarse y la risa,con ellas a modo de saludo...
" ¿Y ahora qué? Preguntó Martha..."
- Bueno....depende....ya sabes donde estamos y lo que somos...¿ quieres jugar? -
Martha accedió. Conocía a varias sumisas dispuestas al juego,así que,hablo con ellas,y se sentó a observar....
Diego no se lo pensó dos veces. A una la colocó en él potro. Otra,en la Cruz de San Andrés. En ambas manos,látigo y flogueer. Pinzas en sus pezones,y estimuladores clitorianos.
No tenían permitido correrse en 10 min. Perdería su apuesta...
Azotes,caricias,gemidos,gritos de placér...
Martha,se retorcía de gusto en su trono de Reina...relamía sus labios,mientras veía la enorme erección de Diego.
En un momento,se levantó para ir al baño. No podía mas,necesitaba desahogarse.
Diego entró. La dió la vuelta y la empotró,dejando su coño chorreante impactado...
Ni apuestas ni nada...se necesitaban...
Tremenda noche.....en el baño,si...Sin roles. Solo siendo. Solo sintiendo. Siendo primales....
Por: Zoraida Diaz